En forjados de viguetas de hormigón, ya sean de cemento portland o aluminoso, cuando existe la presencia de humedades (por mala impermeabilización o mantenimiento) la armadura oxida, consecuentemente aumentando de volumen y rompiendo la «zapatilla» de la vigueta. Para estos casos Mecanoviga es ideal incluso en los casos de poco espacio, gracias a su cómoda y limpia puesta en obra.